Semanas atrás anunciabamos, con sentido pesar, que las líneas de platos Technics 1200 y 1210 se dejarían de producir a principios del año próximo. Dicha noticia se había dado lugar en numerosos y prestigiosos portales, pero la gota que rebalsó el vaso fue cuando uno de los voceros de Panasonic Australia, Ian North, terminó por confirmar el asunto refiriendo que, por razón de las escasas ventas, los 1200 y 1210 no se habrían de manufacturar más.
Es de entender que estaba todo dicho, pese a que Panasonic en ningún momento decidió despacharse oficialmente con un comunicado que desentrañara la suerte que habrían de correr los platos en pugna. A este respecto, prestigiosos sitios reclamaron información perentoria, pero de la acreditada firma no obtuvieron respuesta alguna. Y bajo tal estado de cosas, había una sola conclusión posible: los Technics 1200 y 1210 tenían su fecha de caducidad señalada, pues el silencio de Panasonic no hacía más que asentir, concediendo así valor a los fundados rumores que se daban por doquier.
Habida cuenta del cariz del asunto, finalmente la firma se dignó a resolver el entresijo que ella misma permitió que se generara. Hoy mismo Panasonic remitio a Resident Advisor una respuesta aclaratoria respecto del meollo en cuestión: “Como empresa mundial importante, Panasonic mantiene todas sus operaciones bajo constante revisión. Sin embargo, no hay planes para discontinuar la marca Technics y la producción de platos Technics”.
Con todo aclarado, sólo resta saber qué era lo que pretendía Panasonic desenvolviéndose en la forma en que lo hizo. En el caso de que Ian North hubiese dicho verdad y realmente las ventas de los Technics 1200 y 1210 hubiesen sido escasas los últimos tiempos, esto movería a pensar que lo sucedido no fue más que una estratagema de mercadeo, y más aún si se atiende a la significativa fecha en la que se dio el asunto. Y es que no caben dudas de que, en vistas de que los platos se iban a dejar de fabricar, no pocos habrán corrido a las tiendas a fin de hacerse de sus Technics, influenciados también por el irrefrenable impulso de comprar que suele apoderarse de las almas nobles todas las vísperas de navidad.
0 comentarios:
Publicar un comentario